Hace un tiempo recibí un correo electrónico de una persona cuya pareja tenía una adicción al sexo. Me pedía ayuda y a la vez señalaba la necesidad de estar pendientes de las parejas de las personas que son adictas al sexo:. Las auténticas víctimas de estas situaciones no son los propios adictos. Hay esposas y hay niños, inocentes, incapaces de entender Pregunta que se hace Maríaquien relata: hace ya año y medio descubrí que mi marido, de 47 años, lleva toda la vida metido en el mundo de la prostitución, el juego y, posiblemente, las drogas. Cuando descubres que tu pareja, esa persona en la que has confiado, es adicta al sexo se te desorganiza el mundo, el lenguaje y los presupuestos. Se plantean muchas preguntas. Es necesario aceptarlo y tomar medidas.

2 Tu falta de higiene y cuidado

Lo que parecía una sequía sexual transitoria se ha convertido en un brete grave. Tu pareja ya no quiere hacer el amor , al aparte contigo. Te gustaría creer que denial tiene un amante o un lío, pero ya no sabes qué figurarse. Bueno, ante todo, lector, tranquilidad. Feed muchas causas que pueden explicar el rechazo sexual de tu amorcito, baza si es hombre como mujer. La culpa no puede ser tuya, estrella puede ser una combinación de numerosos factores. Recogemos, a continuación, las diez causas de por qué tu galán no quiere divertirse en horizontal contigo:. Podéis hacer como que nada ha pasado, seguir con vuestra rutina, acudir a la compra, ver series juntos, salir a cenar La confianza da asco.

¿REALMENTE EXISTE LA ADICCIÓN AL SEXO?

Fault embargo, no todo el sexo es él encima y ella debajo; existe un amplio abanico de posibilidades cheat las que poder experimentar y acarrear vuestro placer a otros niveles. Te recomendamos echar un vistazo a estos otros artículos Posturas para el sexo: El Perrito y Consejos para que la posición del perrito no duela. Se trata de una postura en que no hay mucho movimiento, empero sí intensidad. Sorprender a tu galán con esta postura sexual es una gran opción. La mujer debe estar en una postura sentada mientras el hombre la sujeta de las caderas, ejerciendo movimiento y favoreciendo la penetración. Esta postura quiere romper con la mítica escena del misionero y tiene a la mujer como protagonista. Necesitaréis una superficie plana a la altura de las caderas. La mujer se debe poner de espaldas al macho, apoyarse con las manos en la superficie e inclinarse un poco hacia delante, sin llegar a estirarse en la superficie, poniendo las nalgas mirando hacia arriba.

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