Y uno de ellos es el lingüístico. Las palabras tipa, individua o zorra siguen remitiendo a conceptos que nada tienen que ver con el femenino de tipo, individuo o zorro. Quienes luchan por erradicar el sexismo del lenguaje rechazan que se utilicen expresiones masculinas para referirse a personas de los dos sexos. Pero todas estas propuestas tienen multitud de detractores. Tal vez no cuajan porque al menos algunas de ellas no resultan muy operativas. Hay quien encuentra ridículo, artificial y poco eficaz pasarse el día desdoblando sustantivos. Tampoco es demasiado bien acogida la propuesta de usar el femenino como genérico. El uso del femenino para referirse a hombres y mujeres no deja de ser la misma forma de discriminación pero con el otro sexo, pero hay formaciones políticas y grupos de opinión que lo utilizan a modo de protesta y provocación para evidenciar que el lenguaje no es aséptico y que el género de las palabras importa.
Video Playlist
Se las regaña, aconseja y ordena, todo un mundo de señalamientos a acompañar. La contradicción extrema: el lenguaje que silencia; esto es, a través del habla se induce al mutismo. Especialmente se apunta a la ridiculización del lenguaje intragenérico en los pocos espacios que las mujeres tienen -o tenían hasta hace poco, ya que por los cambios tecnológicos y las formas de vida en determinadas sociedades esto ya no es así- para andar y comunicarse. El consenso de opiniones intergenérico en este sentido nos apunta a la hegemonía del modelo artistic gramsciano, en donde los dominados comparten con los dominadores, hasta cierto punto, las creencias y valores socialmente establecidos Gramsci Como decíamos, esto queda muy patente, al poner los refranes en boca de las mujeres, la descripción censuradora o impugnadora de su propio comportamiento lingüístico, asumido al parecer y reproducido, como agentes sociales activas que son. Desde una posición que se columpia entre el menosprecio y el miedo, el comportamiento lingüístico de las mujeres ha sido duramente esclavo y sancionado por los mensajes orales de la cultura popular y concretamente, como estamos viendo, por el alocución lapidario del refranero. Las mujeres han estado tradicionalmente olvidadas, excluidas y cuando se las tiene en cuenta es para callarlas, censurarlas, insultarlas o ridiculizarlas. Pese a todo lo cual, se considera que el silencio no únicamente es muestra de dominación, también es principio de poder Tannen , y a la inversa, todo depende de cada contexto en particular.
En familia
Cuando las noticias de mediodía, del acanaladura Fox estadounidense, abrían hace unos días con esta bomba, la mirada de muchos sostenía una forma incrédula. Pues abriendo estaba un telediario nacional cheat Chicas malas, uno de los principales escaparates de ese subgénero de la vida denominado guilty pleasure. El subgénero favorito de esa gente llena de prejuicios que no se acepta a sí misma. Si alguien reniega de ello debe saber que no tiene razón. Y estas 93 legendarias frases así lo demuestran. Sé que parece que soy una zorra, pero eso es sólo porque me porto como una zorra. Este es el pesado de Damian, es insoportablemente gay. En una ocasión Regina George me dio un puñetazo. Fue una verdadera alucine.